Una de las reglas que todos aprendemos al comenzar a jugar ajedrez es que, al llegar con un peón al extremo del tablero, lo puedes convertir automáticamente en otra pieza.
Por supuesto, en la mayoría de los casos la pieza escogida es la dama, que es considerada la más poderosa de todas en el ajedrez.
Por lo tanto, hablamos de ‘underpromotion’ (del inglés under -por debajo, o insuficiente- y promotion -promoción-) cuando un jugador, por cualquier razón, decide promover su peón a cualquier otra pieza que no sea la dama. O sea, cuando se elige transformar el peón en un Caballo, una Torre o un Alfil.
También podemos llamar a este movimiento, completamente legal, pero inusual, ‘subpromoción‘ en una traducción libre al español, aunque la versión en inglés ha tendido a volverse más popular.
Veamos sus aspectos más importantes.
¿Por qué un jugador hace una underpromotion?
La pregunta que salta inmediatamente es ‘¿Por qué alguien en su sano juicio preferiría promover su peón a un Caballo en vez de una Dama?‘.
Bueno, podemos nombrar por lo menos 4 buenas razones que explican que un jugador elija hacer una underpromotion:
- Evitar tablas (sea por ahogado o por repetición)
- Crear un ataque devastador
- Generar un mate directo
- Defenderse de una amenaza inminente.
Fíjate en la siguiente imagen que viene de una partida entre Zvonimir Mestrovic y Svetozar Gligorić en 1971.
El peón negro amenaza con promoverse en la siguiente jugada y la ventaja del negro parece definitiva. Pero ¿puede el jugador de negras encontrar una mejor jugada que promover una reina?
Así es, aunque instintivamente podemos pensar en promover nuestros peones a Damas, a veces hay mejores opciones tácticas o incluso estéticas.
El valor estético de la underpromotion
Sí, la underpromotion también tiene un valor estético. Hacer una buena underpromotion significa creatividad, una capacidad de cálculo profundo y una visión de juego poco convencional.
Es un tipo de jugadas que escapa de los moldes preestablecidos y por eso deja una impresión imborrable en los otros jugadores.
Muchos estudios artísticos hacen uso de partidas con underpromotion por su capacidad de sorprender y mostrar la belleza de una solución bien ejecutada.
Fíjate en la siguiente partida entre los grandes maestros Hikaru Nakamura y el excampeón mundial Vladimir Kramnik, jugada en la Olimpiada de Estambul en 2012.
En la jugada 62 llegaron a la siguiente posición. Nakamura con blancas le tocaba jugar y en esa situación desesperada, muchos principiantes no hubiesen pensado en otra opción que no fuese una Dama.
Pero sería un grave error y, de hecho, promover una Dama lleva a la derrota en esta posición. Entonces, ¿qué hizo Nakamura?
¡Genial jugada de Nakamura! Esta underpromotion le permite ganar un tiempo clave (gracias al jaque) para evitar la promoción del peón negro (Rxe1) y entrar en un final ganador.
¿No es hermoso el ajedrez?
Recomendaciones para principiantes
Si quieres aprender a ser un maestro de las underpromotions te recomendamos que sigas los siguientes principios:
- No promuevas sin pensar: antes coronar tu peón, revisa si hay alguna razón táctica (o tal vez estética) para escoger otra pieza.
- Estudia partidos de maestros: actualmente diferentes canales de Youtube explican estas partidas, pero también puedes recurrir a los viejos y siempre confiables libros.
- Practica con ejercicios y rompecabezas: Puedes encontrar muchos ejercicios para hacer que incluyan la underpromotion tanto en webs como Lichess como en libros especializados.
Juegos importantes con underpromotion
Si quieres comprender mejor el funcionamiento de la underpromotion en ajedrez no hay mejor forma de hacerlo que revisar y estudiar partidas reales donde haya ocurrido esta situación.
Por eso, en esta sección, te dejamos algunas partidas interesantes y ejemplares que pueden darte soluciones creativas a problemas complejos.
Max Lange – Georg Shultz
Una partida clásica, jugada en el siglo XIX, específicamente en 1863, a partir de una Apertura Española, y que nos muestra en 42 movimientos el poder de la underpromotion ya en tiempos tempranos.
Korody – Bologh
Por lo general, las promociones (y sus hermanas menores, las underpromotions) ocurren al final de las partidas. Esta partida es especialmente impresionante porque con tan solo 7 jugadas ya nos encontramos en un terreno fantástico.
Anatoly Karpov – Jan Timman
Para los fanáticos de las partidas estratégicas y del genio de Anatoly Karpov, aquí tenemos esta partida larga (la underpromotion ocurre en la jugada 87) pero que va la pena para comprender su uso cómo arma estratégica, en este caso mantener la iniciativa.
